Un grupo de arqueólogos de la
Universidad de Alaska Fairbanks y de la Universidad Estatal de Florida ha
encontrado fósiles de temibles tiranosaurios en Alaska.
El hallazgo tuvo lugar en el río Colville al
norte de Alaska cerca del Polo Norte, donde hallan por primera vez evidencias
que probarían que estos animales también criaban a tan baja temperatura.
Esto contrarrestaría dos hipótesis que se tenían por
ciertas. La primera es que los dinosaurios migraban a zonas más cálidas para
poner sus huevos. La segunda es más impactante, pues según los investigadores,
es una “prueba convincente” de que estos animales tenían la sangre caliente, y
no fría como la mayoría de reptiles modernos.
Los fósiles hallados constituían una “guardería
prehistórica” y su tamaño provocó que los investigadores tuviesen que trasladar
el sedimento en cubos hasta el río para lavar el material de rocas y tierra.
Según Pat Druckenmiller, autor principal del artículo, la tarea fue como
“buscar oro”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario